lunes, 30 de abril de 2012

Acuerdo de Gobernabilidad y Concordia


El pasado miércoles 25, el Gobernador Constitucional del Estado, Gabino Cué hizo "un llamado firme, honesto y decidido a las organizaciones sociales y sectores de la entidad, a los pueblos indígenas, a los maestros, a transportistas y a grupos de colonos; a los empresarios, sindicatos, intelectuales y artistas; a los jóvenes y a las mujeres, a las personas de la tercera edad, para que juntos suscribamos un Acuerdo de Gobernabilidad y Concordia y hagamos de Oaxaca un modelo de democracia en el ejercicio irrestricto de los derechos de todos". Lo anterior bajo el anhelo de construir en el estado un entorno de libertad, paz, seguridad y armonía. Que permita hacer de Oaxaca un modelo en el ejercicio amplio de las libertades públicas y de los derechos humanos, así como la construcción de un entorno de concordia, en el que se respeten los intereses legítimos de todos los oaxaqueños, especialmente de los grupos más vulnerables de nuestro tejido social. El espíritu del acuerdo propuesto busca "que las demandas y luchas sociales de todas las regiones, municipios y comunidades de nuestro estado, puedan expresarse y obtener respuestas, sin lastimar los derechos de terceras persona, ni la armonía social y otorgue cabal respeto al desarrollo de las actividades productivas, laborales, culturales y sociales del estado".
Los considerandos de dicho acuerdo se reducen a tan sólo nueve, pero en realidad dadas las circunstancias por la que hemos atravesado los oaxaqueños durante los últimos meses y años, pudieran ser muchos más, pero en los expuestos se engloban la mayoría de ellos. Estos parten de "Que Oaxaca es un Estado pluricultural y multiétnico, caracterizado por una histórica tradición de lucha social por la reivindicación de los derechos sociales". "Que a la par de las cotidianas muestras de solidaridad, unión y convivencia que distinguen y engrandecen la interacción social de los oaxaqueños, son también frecuentes las manifestaciones de inconformidad ciudadana y de organizaciones que se expresan a través de movilizaciones y acciones públicas para exponer y defender sus reivindicaciones; las cuales confluyen mayoritariamente en la capital del Estado con el propósito de obtener respuestas a sus demandas". "Que frente a las movilizaciones sociales, resulta necesario conciliar el ejercicio de los derechos y libertades de asociación y manifestación con los derechos fundamentales de las personas que se ven afectadas de diferentes maneras por la práctica de estas expresiones públicas". "Que a ningún oaxaqueño se le debe conculcar su derecho a la manifestación de las ideas, ni su derecho a reunirse o asociarse; como tampoco se le puede negar a la sociedad su derecho a disfrutar de la tranquilidad, al libre tránsito y a disfrutar de la paz pública". "Que Oaxaca requiere consolidar el Estado de Derecho para fortalecer su armonía e impulsar su desarrollo". "Que los oaxaqueños requerimos de un Acuerdo de Gobernabilidad y Concordia, fundado en la voluntad libre y democrática de la sociedad, y que por ningún motivo se imponga mediante la fuerza pública, condicionamientos o la coacción"."Que la sociedad oaxaqueña ha expresado en forma reiterada su deseo terminar con la tensión e incertidumbre que genera la percepción de una sociedad dividida y anárquica, cuyas expresiones han inhibido el desarrollo sostenido del estado y sus comunidades, además de afectar el curso de la economía, la generación de empleos y la calidad de vida de todos".
"Que este entorno de incertidumbre limita también las oportunidades de los niños y jóvenes de Oaxaca, quienes esperan de nuestra generación, la mayor responsabilidad y el mejor desempeño, para que ellos puedan tener una educación y un futuro a la altura de sus necesidades y expectativas" y "Que la mejor manera de atender los rezagos de Oaxaca y las diversas demandas es la apertura de vías de diálogo y acuerdo entre las Instituciones y las organizaciones sociales; que el ejemplo y legado republicano y reivindicador del Gran Benito Juárez, es el que debe guiar e inspirar la construcción de un presente y un futuro de grandeza para Oaxaca".En reciprocidad el Gobierno del Estado se compromete a lo siguiente: "El respeto irrestricto de los derechos y libertades públicas y civiles de los oaxaqueños y de sus diversas formas de organización y lucha social. El respeto a los derechos y libertades de terceros.Atender con prontitud, respeto y eficiencia a las organizaciones sociales, sin importar su filiación política o condición social, además de responder en cada caso con claridad y en el marco de la Ley lo que proceda, siempre velando por el interés superior de todos los oaxaqueños.
No poner en riesgo la paz pública, los servicios básicos, ni las actividades productivas de fuerte repercusión en la economía y bienestar de la sociedad, así como restaurar la confianza en las leyes y las instituciones, mediante un ejercicio democrático y socialmente responsable de los actos de autoridad. Mantener el Estado de Derecho y el orden público, por ser patrimonio irreductible de todos los oaxaqueños, pero nunca a costa de las libertades y derechos fundamentales de ciudadanos y las organizaciones sociales. Ofrecer un trato digno, eficiente y diligente a los particulares, organizaciones sociales o asociaciones civiles que realicen trámites en las instituciones de la Administración Pública Estatal, con la finalidad de evitar a la ciudadanía pérdida de tiempo, gastos infructuosos y traslados innecesarios de alguna región del estado a las oficinas gubernamentales ubicadas en la Ciudad de Oaxaca. Fortalecer la transparencia en las acciones del gobierno a través de la difusión oportuna y veraz a la opinión pública del avance en los acuerdos obtenidos con los diferentes sectores y organizaciones de la población. Contar con una policía cada vez más eficiente, respetuosa de los derechos humanos, mejor coordinada, regionalizada y cercana a las comunidades, a fin de brindar una mayor seguridad a los ciudadanos y sus familias y a trabajar en estrecha cooperación con los Poderes Legislativo y Judicial del Estado para mejorar sustancialmente la procuración y la administración de justicia, mediante la mejor preparación de ministerios públicos, jueces y magistrados, así como la apertura de cada vez más centros de mediación para la resolución amistosa de conflictos familiares y sociales". En tanto las Organizaciones Sociales se comprometen a: "Expresarse y manifestarse en ejercicio de sus legítimos derechos, en un marco de apego a la Ley y de respeto a los derechos de terceros. Se comprometen asimismo a no poner en riesgo la paz pública, los servicios básicos, ni las actividades productivas de fuerte repercusión en la economía y bienestarde la sociedad. A construir juntos, Sociedad y Gobierno, un nuevo espacio para dialogar con respeto a la Ley y encontrar a través de una comunicación permanente, la solución a los problemas ancestrales y emergentes, con el único límite que supone la capacidad financiera del Estado y la legalidad de las demandas planteadas".
Estoy convencido de que es tiempo de darle un nuevo rumbo al destino de nuestro estado, razón por la que celebro dicho acuerdo y como un ciudadano comprometido con el desarrollo del mismo, lo suscribo con el mismo anhelo manifestado por el Gobernador Gabino Cué; ¡Oaxaca se lo merece!
¿Y usted amable lector?

lunes, 23 de abril de 2012

Habrá voto diferenciado


Dada las circunstancias políticas que los ciudadanos hemos comenzado a ver a tan sólo unas semanas de iniciadas las campañas electorales, resulta fácil proyectar que para la elección de Presidente de la República, Senadores y Diputados Federales la ciudadanía emitirá su voto en forma diferenciada. Y es que al ver cómo las ideologías han pasado a un segundo término, por lo que sin el menor decoro los aspirantes abandonan su partido de izquierda para competir ahora en uno de derecha y viceversa, o al analizar los perfiles de cada uno de ellos y descubrir que no garantizan lo que como ciudadanos demandamos, o al observar que se rodean de personajes que lejos de generar la confianza del ciudadano producen enojo y descontento, o al detectar a candidatos que no nacieron en el distrito o en el estado en el que solicitan el voto y que sustituyen su falta de cercanía con la población con en evidente dispendio de recursos, al elector no le queda más qué pensar muy concienzudamente a quién le entregará su voto.
De entrada el voto duro de los partidos resulta insuficiente para ganar cualquier elección, más cuando han sido los propios institutos políticos y sus “militantes distinguidos” los que con su actuar han generado una tremenda confusión entre los votantes. Y es que sorprende el ver al que antes fue dirigente de un partido político apoyando ahora la candidatura de un aspirante que pertenece a otro distinto; o el personaje que teniendo una trayectoria de por vida identificada con tal o cual color, hoy se pasa al partido del cual era opositor; o qué decir del que se rodea de gente que siempre le estuvo poniendo obstáculos al proyecto que dice enarbolar y de paso relega a quienes trabajaron en dicho proyecto. Ni qué decir del candidato que en privado pide el voto para su candidatura, pero da instrucciones para que a la diputación se apoye a otro de distinto partido y para Presidente de la República se elija al “que quieran”. Por eso es que sostengo que el próximo 1 de julio habrá voto diferenciado. ¿Pero qué es el voto diferenciado?, le explico.
Hasta hace algunas décadas, la ciudadanía emitía su voto en función a una identidad ideológica con los principios y colores de su partido, se sentía orgullosa de pertenecer a uno de sus organismos por lo que incluso se llegó a hablar de un voto corporativo. Con el paso del tiempo y derivado de los malos gobiernos surgidos de ese mismo instituto político, un gran sector comenzó a manejar lo que se denominó un “voto de castigo” que a la postre derivó en la alternancia tan anhelada por millones de mexicanos. De ahí surgió un nuevo concepto: el de “voto útil” o el que identifica a un amplio sector de ciudadanos que no tienen su voto definido y que es hasta el momento de sufragar cuando determinan a quién entregarle su voto, siendo los que finalmente inclinan la balanza a favor de uno de los candidatos cuando la competencia se encuentra cerrada. En democracias más avanzadas el voto diferenciado se asume como un comportamiento normal en estados fuertes y bien establecidos, mediante el cual los ciudadanos utilizan su sufragio para no otorgar a una sola fuerza política el control total de todos los espacios políticos, impulsando con ello el equilibrio entre los poderes públicos, en la gran mayoría de los casos, el Poder Ejecutivo y el Legislativo, así como entre los tres niveles de gobierno, entiéndase el federal, el estatal y el municipal.
Así que aquél candidato que le esté apostando a ganar tan sólo porque supone que su aspirante presidencial arrollará en forma abrumadora y le derivará fotos a su favor, está tremendamente equivocado. Lo mismo con el candidato a diputado que piensa que porque ya su partido lo hizo candidato en automático ganará gracias al voto duro o redes que se identifican con sus siglas, o el candidato al senado que cree que esgrimiendo propuestas que están fuera de su alcance por límite de facultades y de funciones, y que ya se siente en el escaño, pudiera llevarse una desagradable sorpresa. Es que la ciudadanía ha aprendido a votar por la persona y no por el partido, de ahí que desde la elección del 2006 se comenzaran a registrar porcentajes distintos en los votos emitidos para Presidente de la República, Senadores y Diputados; incluso existe el registro de estados y de distritos donde obtiene el triunfo el candidato presidencial de un partido, pero para el Senado y la Cámara de Diputados lo obtiene el candidato de otro partido.
De ahí que mucho se hable del binomio Partido-Candidato y de las transformaciones que esta dupla ha tenido derivado precisamente de la apreciación ya sea positiva o negativa que se tiene principalmente sobre los Institutos Políticos, me explico: Antaño, el ser candidato del partido hegemónico era garantía de triunfo, eran los tiempos en que se afirmaba que poniendo hasta una vaca de candidato, se ganaba. Enseguida ya la ciudadanía buscaba el equilibrio entre un buen partido y un buen candidato, esto propició que los que se consideraban “buenos candidatos” pero que no tenían el visto bueno de sus partidos para contender, emigraran hacia otros colores, pero siempre buscando no perder la afinidad ideológica. Después ya no les importaba la ideología de partido sino obtener el registro solamente, lo que propició el desconcierto de la ciudadanía que finalmente ha optado por apoyar a la persona que más o menos haya guardado congruencia con sus principios. Por eso cuando el ciudadano ve desde su particular perspectiva partidos desacreditados con malos candidatos, de inmediato se haga la pregunta ¿y ahora por quién vamos a votar? De ahí que surja la posibilidad de emitir un voto diferenciado que le permita elegir el antecedente, la trayectoria, la propuesta o incluso al aspirante menos malo sin considerar los principios, ideologías o documentos básicos del instituto que lo postula. En consecuencia que resulte más recurrente que un mal candidato busque imponerse en uno de los partidos llamados grandes, pues así accede a los votos que por imagen no se le otorgarían y que un buen candidato lo haga con uno de los partidos emergentes o “pequeños”, pues supone que su propia imagen compensará lo anterior. De ahí que la ciudadanía diferencie su voto entre el partido y el candidato.
El 1 de julio próximo habrá voto diferenciado.

lunes, 9 de abril de 2012

Oaxaca se recupera


Durante la Semana Mayor que está por concluir, para los oaxaqueños resultó sumamente satisfactorio el observar nuestras calles repletas de turistas, ya que ello implica una derrama económica que ante las circunstancias actuales, resultaba algo urgente para los empresarios y los trabajadores que en los últimos años habían padecido de una grave crisis financiera. No es que con la actual afluencia turística se hayan recuperado de las pérdidas anteriores, no; lo que si nos queda claro es que con un poco de disposición, Oaxaca puede recuperar el lugar preferencial que lo ubicó como uno de los destinos turísticos por excelencia y con ello mejorar su economía.
Claro que falta mucho por hacer todavía, tanto por las autoridades, como por los empresarios, así como por los líderes sociales quienes debemos entender que un estado en paz y en progreso nos conviene a todos. Debemos comprometernos a brindar lo mejor que en nuestra actividad nos corresponda. A la autoridad brindando la seguridad y las facilidades para que quienes nos visitan se lleven un grato recuerdo de la ciudad y del estado. Los empresarios proporcionando un servicio de calidad y precios justos. Los líderes sociales liberando los espacios públicos que nos pertenecen a todos y comprendiendo que el turista quiere transitar y disfrutar a plenitud de nuestras calles. Si bien es cierto que por años se desalentó la generación de empleos y con ello se propició el crecimiento del comercio ambulante, también lo es que la ciudadanía prefiere ver nuestras calles y el Zócalo tal y como lo hemos visto estos últimos días, libre de bloqueos y de vendedores ambulantes.
Afortunadamente tenemos una autoridad municipal y estatal que aprenden de lo que se hace bien, pero también de lo que se hace mal; pero lo sobresaliente es que existe la voluntad para ir corrigiendo y hacer mejor las cosas. Si bien es cierto que hubo molestia por parte de la ciudadanía porque los ambulantes se trasladaron al Parque Juárez, también hay que reconocer la disposición gubernamental para generar políticas públicas que reincorporen a esos vendedores a actividades productivas reguladas y lícitas. Lo deseable es que en lo inmediato esos grupos de presión que se escudan detrás de la necesidad de los vendedores, no tengan argumentos para amagar o chantajear no al gobierno, sino a los oaxaqueños que al igual que ellos sabemos que los espacios públicos son eso precisamente: públicos; razón por la que nos pertenecen a todos y no sólo a unos cuantos. En la medida de que Oaxaca se recupere se generarán nuevas fuentes de empleo, de ahí que sea necesario el entender que una cosa lleva a la otra y no al revés. De ahí quienes insistan en detener y criticar todo lo que signifique un avance, ya que en sus cálculos políticos todo lo que sea reconocido al actual gobierno, electoralmente les perjudica. Citaré un ejemplo.
Al inicio de la semana bajo el argumento de contar con la protección de la Sección XXII del Sindicato de Maestros, diversos vendedores ambulantes se instalaron en el Zócalo. De inmediato una campaña para preguntar y señalar que dónde estaba la autoridad que permitía tal situación, no se hizo esperar. Cuando la autoridad ejerció su facultad de resguardar el espacio público, esas mismas voces ahora salieron a decir que se tenía un gobierno autoritario y represor, que no permitía a esos desesperados vendedores ambulantes generar un poco de ingresos en esta temporada que es cuando logran “recuperarse”. La autoridad municipal privilegiando en todo momento el diálogo optó por permitir el traslado de estos vendedores al Llano, pues enseguida esas mismas voces pusieron el grito en el cielo, qué como era posible que eso se hubiera hecho, que se afectaba a los deportistas que diariamente hacen sus ejercicios en dicho parque (lo que es cierto). Y como el Zócalo lucía limpio y seguro, de inmediato se dieron a la tarea de decir que el turista se espantaba al ver tanta policía en el primer cuadro de la ciudad, que por eso no querían ir a los portales, etc. Lo cierto es que ante un gobierno que ofrece soluciones, sólo les queda descalificar y distorsionar lo que ante los ojos del ciudadano común es algo positivo.
Lo cierto es que vimos una ciudad con vida; con un Jardín Sócrates lleno de propios y extraños que esperaban pacientemente un espacio para disfrutar de nuestras tradicionales nieves oaxaqueñas. Los portales, así como diversos restaurantes repletos de turistas que degustaban de nuestra exquisita gastronomía. Hoteles con una ocupación notoriamente superior a la registrada en años anteriores, esto a pesar del sismo y sus réplicas que provocaron cancelaciones de última hora. Una procesión del silencio que impactó y conmovió al más escéptico. La visita a las “7 Casas” que se convirtió en un ir y venir de miles de personas que con confianza caminaron por nuestras calles. Los viacrucis que se desarrollaron en diversas parroquias fue otro motivo de atracción para quien nos visitó. Y qué decir de nuestras playas que se mostraron atiborradas de jóvenes y de familias completas disfrutando de nuestras cálidas aguas. ¿Qué será muy difícil entender que ese es el Oaxaca que todos queremos ver y que nos conviene laboral, económica, política y socialmente hablando?
El que Oaxaca termine de recuperarse es una tarea que nos corresponde a todos; ya no puede ser rehén de intereses mezquinos que le apuestan a su inestabilidad para obtener beneficios de grupo. Hoy hemos visto que un Oaxaca distinto y en desarrollo es posible. Preocupa que una vez concluido el periodo vacacional y toda vez que nos encontramos inmersos en un proceso electoral, esas acciones que tanto daño le han hecho al estado se vuelvan a poner en práctica. De ahí que como se hizo en estos días: las autoridades, los comerciantes y los líderes sociales antepongan el beneficio del estado a sus intereses particulares. Resulta gratificante escuchar al taxista, al mesero, al restaurantero, al guía de turistas, entre otros decir que Oaxaca se está recuperando, pero insisto, el que se consolide su recuperación es una labor que nos corresponde a todos.
De nuestra parte asumimos el reto.